Para derrotar a los gigantes
1 Samuel 17.41-54
Los “Goliat” de la vida se presentan en todas las formas, tamaños e intensidades…
*una relación infeliz, un hijo rebelde, un trabajo difícil, un montón de deudas o un hábito incontrolable.
Pero si confiamos en el poder de Dios, entonces, como David,
podemos tener la victoria sobre un problema que parezca insuperable.
David declaró la victoria sobre Goliat antes de que comenzara la batalla (1 Samuel 17:46)
Su confianza vino de:
1.- RECORDAR MOMENTOS DEL PASADO en los que el Señor lo protegió y fortaleció,
como cuando un león o un oso amenazaron a su rebaño (S 17.37).
Al enfrentarse al temible gigante, David recordó sabiamente lo fiel que siempre había sido Dios.
2.- SUS FUERTES CONVICCIONES EN CUANTO AL SEÑOR y de lo que era capaz de hacer.
David sabía que tenía pleno acceso a la provisión de poder,
valentía y sabiduría de su Padre celestial.
3.- LOS HÁBITOS QUE REFORZABAN SU FE. David había pasado horas a solas en el desierto,
escuchando la voz de Dios. Por eso sabía discernir lo que el Señor le decía que hiciera.
Te animamos a que trates de seguir el ejemplo de David.
Llevando un registro de la obra del Señor en tu vida, y meditando en quién es Él. Entonces, podrás estar seguro de que Dios es capaz de ayudarte, sin importar cuán grande sea el problema que enfrentes.